El pasado 15 de
diciembre de 2016, ha tenido lugar el acto de entrega de Premios en el Aula
Magna de la antigua Facultad de Medicina de la Universidad de Granada. Como
algunos ya sabéis me han concedido el Premio Extraordinario de Doctorado
2012-2013. 
Ha sido un día
para recordar, que he podido compartir con familia, y con mis directores
Francisco Javier Perales y José Gutiérrez Pérez. Durante estos últimos años desde la
defensa de la Tesis, se han valorado (en mi caso en la Escuela de Doctorado de Humanidades y de
Ciencias Sociales y Jurídicas), las publicaciones científicas (artículos,
capítulos en libros…), obras de creatividad artística, contribuciones
presentadas en congresos, conferencias, seminarios u otros tipos de reuniones
de relevancia científica, transferencia del conocimiento que contribuya a la
innovación, etc.
Todo ello
no ha estado exento de numerosas dificultades y de todo tipo, y en el camino me
he encontrado con oportunidades de emprender proyectos de diversa índole
compartidos con entidades y personas. A todas ellas (numerosas y entrañables)
mi reconocimiento y quiero compartir también la satisfacción, no solo por el trabajo ilusionante, sino por entender que: “Lo
esencial es invisible a los ojos, y que solo se ve bien con el corazón”.
Y lo esencial en todo esto es el trabajo invisible que se hace, que hacemos, día a
día.
Hemos compartido
y comparto de distintas maneras la ilusión de transformar y transformarnos
porque "Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que
somos". (E. Galeano)
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